Todos en Lobitos - Caleta
de pescadores de Piura- saben que en realidad de llaman “Percebes” pero
nunca pude averiguar por qué todos
lo llaman “Pecebre”
¿Pero qué es en realidad el Percebe? Pues es un crustáceo
que crece en las rocas, pero curiosamente éstas siempre son abatidas por el
oleaje y se alimentan por la filtración pues al no tener extremidades,
permanecen adheridas a las rocas sin poder tener movimiento. Un crustáceo
típico del lugar, que pocos peruanos
pueden saborear.
Pocas personas saben en realidad, lo difícil que es extraerlos, para muestra aquí les pongo un video donde se puede apreciar lo que les cuento
El percebe, es la escusa perfecta para contarles la historia
de Roxani y Gasdali Cajo, dos hermanas que tienen como herramienta de vida la
cocina y este año vendrán a la Feria
MISTURA, al espacio de COCINAS
REGIONALES, gracias a SAVIA PERU.
Ellas cocinan juntas, se cuentan sus penas y alegrías, sacan
adelante a sus familias. Vemos entonces,
como la cocina una vez más se presenta como un arma social.
Poseen un pequeño restaurante llamado “Punta Lobitos” que a la vez es la
casa de Roxani, todos en el pueblo las buscan por su Ceviche de Percebes. Demás
está de comentar que la pesca es fresca, del día.
Como muchas mujeres, la necesidad las llevó por estos rumbos
gastronómicos; se dieron cuenta que a través de sus manos y el amor
incondicional a su familia, podrían desarrollar un modo de vida. En el día
Roxani y Gasdali atienden menús y a la
carta, por la noche Gasdali tiene su carrito donde vende chunchulíes, alitas
broaster, antichuchos, arroz chaufas entre otros, Roxani no trabaja con ella a
esa hora porque se dedica a su bebé.
Uno de los grandes ingresos del lugar, es el turismo
deportivo por las maravillosas olas que posee su mar, privilegiado además por la conjunción de dos
corrientes: Humbolt y del Niño lo que hace poseer una variedad de pesca
espectacular: Pulpos, calamares, langostas, langostinos, ostión, mero, pericos,
atún, entre algunos de nombrar.
Tuve la suerte de poder estar en plena fiesta de San Pedro y
San Pablo y vivir esa fe que poseen por sus santos.
Algo muy curioso de resaltar es que el día anterior a la
fecha central de celebración, se organizan misas y rezos ¿Y qué creen que pude apreciar? Pues en medio
de ello, la comida no faltaba, los feligreses salías y salían con sus bandejas
llenas de aperitivos para sus feligreses.
Y al día siguiente, la emoción me embargaba, ya en el muelle
con la gente a mi alrededor, otra gran
sorpresa me llevé al apreciar la convivencia de tablistas con los lugareños, un
lindo detalle de apreciar fue que éstos foráneos atendían a los lugareños, cosas
que uno tiene que ver para creer.
Lobitos es un rincón del Perú, donde el tiempo no pasa, no
hay prisas, no hay molestias, no hay mañas.
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